Comentario Obligado

Texto/ Carlos O. Morales Imagenes/ Tizoc Cuellar E. El Parque Ecológico San Miguel Acapantzingo, tiene bajo sus cimientos una historia, una leyenda que habrá de perderse al paso de los años, mientras narrar lo que hay bajo ese bello parque de recreación y esparcimiento es un intento por enriquecer la historia de Cuernavaca. En lo que hoy es un lugar de descanso y reunión de las familias morelenses y visitantes, el parque como un gigantesco mausoleo, fue el antiguo penal de Atlacomulco por varias décadas, y en un pasado reciente. Aun abandonada la vieja cárcel, majestuosa aún en ruinas, y escondió en sus rincones, miles de historias de tortura, gritos, violaciones, lagrimas, odio, rencor e impotencia. En sus 66 años de negro historial, el inmueble lucía abandonado, habitado solo por unos cinco custodios que se encargaban de vigilar este centro penitenciario que albergó a todo tipo de delincuentes, desde el pequeño ladrón de poca monta, hasta el más sanguinario asesino, violador o

…Controvertido, polémico, indiscutible, exitoso, humanitario, afable, sencillo, pero, sobre todo, un ser humano generoso, son las características de quienes, por sus acciones, se convierten en leyendas, y en este caso, se encuentra un hombre público, funcionario y empresario, nativo de Yautepec de amplia trayectoria entre la sociedad morelense, así es, Víctor Mercado Salgado. El güero, como todos lo conocen, ha estado en el ojo del huracán, - es decir, estar en el ojo del huracán, es como una metáfora, pues como servidor público en la especialidad del transporte- siempre ha enfrentado, problemas, a veces turbulentos y caóticos procesos, en los cuales ha salido avante. Desde sus primeros años, -donde quien escribe, lo ha tratado- allá en el vetusto inmueble, lo que fuera por muchos años desde la década de los 30, el icónico Hotel Mandel, y posteriormente, las añoradas oficinas de la Dirección Estatal de Tránsito, en el segundo nivel del antiguo edificio, allá por el norte de Cuernavac