…Y Zapata cabalga de nuevo…

Una nueva fisonomía desde el pedestal de Buena Vista/ Martínez Garrigós cumple su promesa de gobierno/ Emiliano Zapata cabalga de nuevo en Cuernavaca/ Hace 39 años José López Portillo le regalo a Morelos esa hermosa estatua/  fueron necesarios  cuatro mil 800 kilos de bronce  y nueve meses para construirla/ toda una odisea para su transportación y colocación.

Carlos O. Morales  


…En su segundo año de gobierno, el presidente de México, José López Portillo, ordenó a dos artistas escultores, la obra que habría de regalar al pueblo de Morelos un año después. Ambos de avocaron a darle vida a una estatua del Caudillo del Sur, Emiliano Zapata Salazar, misma que fue construida en un lapso de nueve meses.

Fueron utilizados alrededor de cuatro mil 800 kilos de bronce, para lograr finalmente una hermosa obra que después de 32 años, ha sido removida por segunda ocasión, y con ello, se logra una mejor fisonomía de la capital del estado de Morelos.


Y así como lo hizo en su lucha por recuperar la tierra de los campesinos, Emiliano Zapata ha vuelto a cabalgar.  Su imagen, ese icono que se conoce en todo el mundo,  ha vuelto a la vida, sus ideales siempre recordados sirven  otra vez para volver a pulir su imagen, para instalarla en un pedestal giratorio y para poner en funcionamiento, un gran cambio en la vialidad y para mejorar las condiciones de vida de miles y miles de morelenses y visitantes.


En aquella memorable fecha del ocho de agosto de 1979,  tras largas nueve horas de trayecto, desde el taller de fundición ubicado en la ciudad de México hasta la plazuela/glorieta de Buena Vista, y con el mismo lapso de tiempo, José López Portillo, llegó en helicóptero,  concretamente al helipuerto de la 24ava zona militar.

Inolvidable para los que hoy pintan canas, para quienes fueron testigos de ese hecho histórico que hoy se repite de nueva cuenta, con un solo cambio, no es López Portillo, sino un joven alcalde, Manuel Martínez Garrigós quien con todos los pronósticos en contra y  con las críticas más negativas y absurdas ha logrado construir una nueva rúa, un paso a desnivel, nuevas avenidas que confluyen a la obra más importante de los últimos 20 años.


En aquel 8 de agosto, el Jefe del Ejecutivo llegó acompañado por la verdadera representación del imperialismo mexicano, mismo que tendría a su máximo representante en la figura de Carlos Salinas de Gortari, para muestra los nombres de algunos de aquellos personajes de la política mexicana.

En primera fila, el entonces Presidente del Congreso de la Unión, Antonio Riva Palacio López, el líder del Senado, Joaquín Gamboa  Pascoe, el titular del Departamento del DF, Carlos Hank González,  Jesús Reyes Heroles, Gustavo Carvajal Moreno, Jorge de la Vega Domínguez, Enrique Olivares Santana, Fernando Solana Morales, en suma, los verdaderos dueños del poder en nuestro país.


Por parte del gobierno estatal que encabezaba, Armando León Bejarano, estuvieron en el evento donde además se celebraba el aniversario del Natalicio de Emiliano Zapata, entre ellos, José  Castillo Pombo, J. Gómez Garduño, y muchos más que en su momento trabajaron en ese sexenio de Bejarano.

Fue una verdadera fiesta popular, hubo entrega de tractores, una vista a la casa/museo del Caudillo del Sur, allá en Anenecuilco, y desde esa fecha solo hubo un intento de un nefasto alcalde del PAN, quien debido a su ignorancia quiso implementar un jugoso arreglo bajo el nombre de “adopta un monumento”, bruto, ignorante y ambicioso, permitió ese alcalde de marras, ponerle al pedestal de Emiliano Zapata el logo de una empresa automotriz, la imagen lo dice todo, aun y cuando la ley, dice que no puede colocarse propaganda ni publicidad en torno a los monumentos públicos.


Hoy 31 años después de aquella  histórica entrega por parte de López Portillo a Morelos, un alcalde con deseos de servir a su pueblo, ha logrado una obra importante, un distribuidor vial, un paso a desnivel, una vía de comunicación que servirá para acortar distancias, para dar una mejor imagen y para demostrar que cuando se quiere se puede hacer grandes cosas aún y cuando  no se tengan todos los recursos posibles.

Hoy da gusto y se siente uno orgulloso de que seamos testigos del progreso, del crecimiento social y político, del desarrollo sustentable pese a los obstáculos que a veces se llegan a presentar.

Manuel Martínez Garrigós ha logrado lo que pocos presidentes municipales, en solo casi dos años de gestión, ha transformado la fisonomía de una ciudad cosmopolita, ha logrado mejorar la imagen,  la vialidad y ha demostrado sobretodo, que su gobierno y el están para lograr grandes metas, aunque a su lado pueda tener a gente nefasta y soberbia, como ese funcionario al que la gente de Cuernavaca ha bautizado ya como “el puerquito valiente”.

Emiliano Zapata cabalga de nuevo por su ciudad, su estado, su tierra, el galope de su caballo, se escucha a lo lejos, su inconfundible figura de sombrero y mostacho sigue vivo en la mente de quienes siguen y seguirán con sus ideales de libertad, de tierra y de lucha por siempre…








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