Leyendas morelenses Jesús Díaz Bustamante
Un bohemio de corazón/ Enamorado por
siempre de Cuernavaca/ Diputado local dos veces/ Hombre de gran corazón y
humildad/ Compositor y atleta además de un gran ser humano.
Carlos
O. Morales
Difícilmente
podemos encontrar a seres humanos excepcionales con carisma, trayectoria y
sobretodo una carrera ejemplar. Además que le canten a su tierra y a sus
mujeres es sin duda un hombre como los que en pleno día buscaba con lámpara en
mano Diógenes en la antigua Grecia.
En
sus años mozos, fue un aguerrido luchador, un apasionado del arte de la Lucha Libre, “El chamaco Díaz”, era su
nombre de batalla, y solo quienes han tenido sueños de grandeza sabe lo que se
sufre en ese deporte, donde el esfuerzo es parte de un sueño por destacar no
solo en el cuadrilátero, sino en cualquier actividad.
Jesús
Díaz Bustamante, es ese hombre, luchador, compositor, servidor público, pero
sobre todo un enamorado de la vida, de su Cuernavaca, porque esta prodiga
tierra es suya desde siempre. Son muchos los ángulos por los que se puede
iniciar una semblanza, y por lo mismo, también muy difícil tener un comienzo y
un final, es en suma, un hombre excepcional a quien hay que tratar de ver más
por el lado humano, aun y cuando tiene dos periodos diferentes en su paso por
el Congreso del Estado de Morelos.
Don
Jesús como lo conocen todos es tranquilo en su trato, en su diario caminar, es
un enamorado de Cuernavaca a la cual ha cantado desde sus años mozos a través de
sus composiciones, cuyas letras ha grabado entre otros, el inolvidable, Antonio
Aguilar, en esa canción, Díaz Bustamante relata el surgimiento de Emiliano
Zapata y su Ejercito Libertador del Sur.
Es
la voz de Antonio Aguilar quien con su inconfundible estilo habla de la lucha
libertaria surgida en Anenecuilco y concluida en Chinameca con la muerte de
Zapata, habla de Genovevo, de Otilio Montaño y de Amador Salazar, de todos
aquellos que lo acompañaron desde 1911. Es una canción histórica/revolucionaria
escrita con el alma y el corazón.
De
las canciones escritas, se empieza a conocer la sensibilidad de Don Jesús Díaz
y la que más lo describe es su canción “Vámonos para Cuernavaca”, que palabras más, palabras menos nos describe
un gran amor, quizás el de su vida, quizás no, pero dice que…! De muy lejos me
llego un mensaje de mi ….. así empieza y es el mensaje de una mujer que le
confiesa la falta que le hace, y por lo cual sola y triste se quedó, y le
propone irse a Cuernavaca donde se vive mejor, donde construirán su nido y
disfrutaran de su amor…es una canción que habla, que describe a la ciudad capital
con los ojos de un joven que con el paso de los años, llega a ser diputado
local en dos ocasiones y que su sensibilidad de escribir a su Cuernavaca
querida le hará mostrar las calles, las flores y las tardes de abril, los amaneceres
de mayo y nos hará vibrar al describir con magistral narrativa lo hermoso de su
ciudad, el paraíso de la eterna primavera.
Jesús
Díaz Bustamante nos hace recordar a través de sus canciones el Cuernavaca del
ayer, la ciudad con sus calles empedradas y sus bugambilias de colores, sus
frondosos árboles, su figura tranquila, su indiferencia al caminar, nos muestra
la calidad humana con la que ha transitado por la vida.
Orgulloso
de sus hijos, María de la Luz, Víctor Manuel, Ricardo y Jesús, actualmente se reúne
con los viejos amigos de los años de luchador, de los cuales quedan pocos, la mayoría
boxeadores de la época de antaño, comparten el pan y la sal, recuerdan sus hazañas,
y escuchan sus canciones, por esto y más, Don Jesús Díaz Bustamante es ….una
verdadera leyenda morelense… un honor conocerlo……
Comentarios
Publicar un comentario